miércoles, 16 de enero de 2008



Noticias de Ciencia
  • Un grupo de científicos de 17 países, entre los que se encuentran investigadores de la Universidad de Granada, ha demostrado que las fuentes de las partículas más energéticas jamás detectadas no proceden de direcciones distribuidas uniformemente en el firmamento, sino que apuntan a zonas en las que hay galaxias con núcleos activos en su parte central y a distancias relativamente próximas. Científicos de la Colaboración Pierre Auger han anunciado en Malargüe (Mendoza, Argentina) que los Núcleos Galácticos Activos son candidatos probables a ser responsables de las partículas o rayos cósmicos más energéticos que llegan a la Tierra, gracias a los primeros resultados del Observatorio Pierre Auger del hemisferio sur en Argentina (el detector de rayos cósmicos más grande del mundo). Estos resultados fueron publicados en la conocida revista ‘Science’. El premio Nobel, James W. Cronin, que concibió en 1991 el Observatorio Pierre Auger con Alan Watson de la Universidad de Leeds, actual director y portavoz del experimento, comenta que este grupo ha dado “un gran paso en resolver el misterio del origen de los rayos cósmicos más energéticos, que fueron descubiertos por el físico francés Pierre Auger en 1938. El firmamento en el hemisferio sur observado con rayos cósmicos no es uniforme. Esto es un descubrimiento fundamental, gracias al que ha comenzado la era de la astronomía de rayos cósmicos. En los próximos años nuestros datos permitirán identificar exactamente las fuentes de estos rayos cósmicos y cómo aceleran las partículas". Los rayos cósmicos son protones y núcleos atómicos que surcan el universo prácticamente a la velocidad de la luz. Se desconocen todavía los mecanismos de aceleración de las partículas a energías que son 100 millones de veces mayores que las obtenidas en el acelerador de partículas más grande del mundo. El Observatorio Pierre Auger registra cascadas de rayos cósmicos con una red de 1.600 detectores de partículas, separados 1,5 kilómetros y cubriendo una superficie de 3.000 km2. Veinticuatro telescopios especialmente diseñados detectan la luz de fluorescencia que emiten las moléculas de nitrógeno de la atmósfera con el paso de la cascada. La red de detectores de partículas y los telescopios de fluorescencia constituyen una combinación excepcionalmente buena, que mejora sensiblemente la precisión de anteriores instrumentos. El observatorio recibe su nombre del científico francés Pierre Victor Auger (1899-1993), que descubrió en 1938 las cascadas atmosféricas producidas por la interacción de rayos cósmicos en la atmósfera. Los Núcleos Galácticos Activos (AGN, de su denominación en inglés) son de los objetos más violentos del Universo. Hace ya tiempo que se conjetura sobre su posible vinculación con la producción de partículas de altas energías. Los científicos piensan que la mayoría de las galaxias tienen agujeros negros en su centro, con una masa entre un millón y unos cuantos miles de millones de veces la masa del sol. El que corresponde a la Vía Láctea, nuestra galaxia, tiene alrededor de 3 millones de masas solares. Las galaxias con el núcleo activo parecen ser aquellas que han sufrido alguna colisión con alguna otra galaxia o han sufrido alguna perturbación importante en los últimos cientos de millones de años. Los AGN capturan la masa que cae por su campo gravitatorio mientras que libera una cantidades de energía prodigiosas, en forma de chorro de partículas. El resultado de Auger indica que los AGN pueden producir las partículas más energéticas del Universo.
Martes, 15 Enero, 2008

No hay comentarios: